SOBRE NOSOTROS

La historia de Quesos Sánchez Hidalgo es la de una familia con una tradición quesera desde tiempos inmemoriales, es el resultado del amor de dos hermanos hacia su tierra, sus costumbres y su modo de vida.

Ya desde pequeños los dos hermanos pastoreaban las ovejas en las vastas extensiones de La Serena y después de las largas caminatas ayudaban a su padre a hacer queso en el chozo donde vivía la familia.

Con el paso del tiempo los dos hermanos quisieron prosperar y convertir lo que habían hecho desde pequeños en la forma de mantener a los suyos.

Hicieron la primera quesería en la casa del campo, poniendo el tanque donde acumular la leche del ordeño en la cocina y convirtiendo una de las habitaciones en cámara de maduración. De esta forma, convivían día y noche con las sensaciones que produce el olor de la leche recién ordeñada y el queso madurando.

Tiempo después decidieron dar un gran paso y construyeron lo que hoy son las instalaciones de Quesos Sánchez Hidalgo, conjugaron la sabiduría que les habían transmitido desde pequeños con los adelantos que había en el momento y dieron lugar a uno de los manjares más exquisitos que existen y que no es ni mejor ni peor que otros, pero sí diferente a los demás, y único.

Hoy día, Quesos Sánchez Hidalgo S.L. sigue siendo una industria familiar donde todos, desde los más pequeños hasta los más grandes, aportamos nuestro granito de arena para ofrecerles lo que mejor sabemos hacer: el auténtico queso de Sánchez Hidalgo.